Descripción
La historia de Ferrol es apasionante, os invitamos a conocerla.
La Puerta del Dique comunica el Arsenal de Ferrol con el ilustrado barrio de la Magdalena. Fue construída por el ingeniero militar Julián Sánchez Bort(Autor también de la concatedral de San Julián) en el año 1765, durante el reinado de Carlos III, si bien ya había proyectos previos de Francisco Llobet y Jorge Juan datados en el 1754.
Fue ideada para cubrir 4 funciones básicas además de la propia de cualquier entrada:
Mostrar la «Grandeza de la Monarquía» y su Real Armada, acoger el Cuerpo de Guardia del recinto, marcar el tiempo y el ritmo de la vida en la Base Naval con su reloj de cuatro esferas y campanario y, por último, albergar la capilla orientada hacia el interior del Arsenal, donde se oficiaba la Misa de Campaña.
Originalmente a la puerta se accedía a través de un puente que solventaba el paso sobre el desaparecido foso que circundaba el arsenal.
Está coronada por el escudo real de Carlos III, formada por un arco triunfal flanqueado por dos columnas toscanas su torre es de planta cuadrada decorada con pilastras de estilo jónico, rematando el conjunto una cúpula semiesférica con linterna de hierro forjado que soporta la campana del reloj.
La siguiente inscripción está colocada en el ático que hay en el primer cuerpo de la torre por la parte exterior y refleja la ostentosidad que se pretendía mostrar en este tipo de construcciones:
«Se ha erigido aquí la obra más grande del supremo arte que alguien haya visto en el mundo; a fin de que contemple a los que recorren todos los mares, a los navíos, a las armadas, a todo. ¡Oh, feliz España! Y ciertamente feliz. Por ti dichosamente gobierna, dirige y para ti reina con sabiduría Carlos III. Rey ilustre, piadosisimo y augusto: a quien todo el orbe no alcanza. Año 1783.»
La fachada interna del Arsenal, ideada para albergar al Cuerpo de Guardia, se configura en forma de patio porticado, con arcos de medio punto y bóvedas de arista. En el extremo del sudoeste una magnífica escalera de caracol da acceso a la terraza. En la torre, la capilla se abre en galería acristalada hacia el patio donde formaba la tropa, la maestranza y los mandos para la Misa de Campaña.
A día de hoy la puerta del Dique, es todo un símbolo de Ferrol y se erige como muestra de legado que dejó el siglo de las Luces en la ciudad.
